viernes, 11 de enero de 2008

A tí yo te sonrío

Estoy corriendo por ese camino de piedras. Busco un maldito taxi que me lleve a tus brazos. Miro a la nada y miro la hora.Te veo a punto de irte, llego con lo justo. Ahora te doy un abrazo y me contengo.Siento un riachuelo en tus ojos, pero aún así me sonríes y lanzas un "hijo ya me voy, cuidate mucho".Y no te digo nada.Sólo te doy un beso y te regalo un abrazo eterno.No te digo nada, pero te beso los cachetes viejos.Te paso la mano por tu pelo y te doy otro beso.No te digo nada más.Y retrocedo para seguir despidiéndome.

Nuestra gente aún permanece en el lugar. Me aparto porque quiero verte,quiero seguir tus pasos mientras le pides ayuda a mi madre para subir al bus. Me doy vueltas porque las fuerzas se acaban.Regreso a verte.Quiero ubicarte, saber donde estás sentada,quiero mirarte a los ojos y decirte que te amo. Decirte que quiero irme contigo, que quiero permanecer a tu lado.Te miro porque quiero poner mi cabeza en tus faldas, que me acaricies como la hacías cuando era un niño,que me prepares café y me des unos panes en el desayuno. Quiero que me digas "muchacho, eres un panero".



Te miro detrás de un vidrio y nos sonríes a lo lejos. Te miro otra vez porque recuerdo cuando de niño me llevabas en tu carro a La Huaca. Quiero quedarme otra vez contigo en esa casa bendita del pueblo. Quiero que me mandes a comprar arroz al mercado, que me pidas pescado fresco y flores, muchas flores para la tumba de mi madrina y tu hermana. Te miro, abuela, te miro tras ese vidrio y quiero que me riñas como antes, que me digas que ya no juegue fútbol en la calle, que me cures esa herida con limón.

El chofer enciende el bus y te me vas. Sigues sonriendo.Sigues haciendo honor a tu apodo de toda la vida: eres una niña en este momento.Eres la mami niña. Y te miro esta vez porque pienso en los viejos tiempos. Quiero acompañarte,como antes, en el pueblo, a visitar a tus amigas de infancia, quedarme horas esperándote mientras conversas. Quiero que digas otra vez quiénes me han visitado, quiero que se te olviden los nombres de mis amigos nuevamente.



Quiero que me preguntes otra vez por qué elegí estudiar periodismo, y si algún día llegarás a verme en la tele o a leerme en un periódico.Quiero, abuela, que me sigas enseñando los recortes de periódicos en donde sale mi nombre. Quiero que me preguntes qué hace un periodista y por qué no fui contador, como el abuelo. Que me digas de nuevo:"Hay muchacho, ya tuvieras todos los trabajos de Manuel Herrera.

Y te doy una última sonrisa, mientras levantas una mano a nuestra gente.Te sonrío con amor, te miro con ternura.Te sonrío porque eres la mitad de mi cuerpo.Te miro a los ojos otra vez.Y cierro los puños para mandarte las fuerzas del mundo entero.Te sonrío y, mientras te escribo, sigo sonriendo porque no puedo sacar de mi cabeza tu rostro, ni tus canas. Te sonrío porque lucharé contigo desde donde estoy.Lucharemos todos a tu lado. Porque por tí sonreiré eternamente. Te sonrío para decirte:¡¡Vamos abuela, carajo!!

Etiquetas:

3 Comentarios:

A la/s 15/1/08 9:30 a. m., Anonymous Anónimo dijo...

pelao hiciste que recuerde a mi abuela. cuando tenía nueve años se puso mal.Le dio cáncer. Yo fui el último nieto. Me quería, me amaba. la recuerdo y lloro. grande la mámá de la Nancy. Mándale un beso. otro para ti...

 
A la/s 19/1/08 1:30 p. m., Anonymous Anónimo dijo...

Lindo, Aldo, Muy lindo!

 
A la/s 27/2/08 8:10 p. m., Anonymous Anónimo dijo...

mala rabia!!! quisiera escribir como tú carajo!!! jajaja pero lo mío son las imágenes.
Ojalá algún día en alguna secuencia de un corto o alguna foto, pueda llegar a exepresar lo que tú haces con las letras!!
Muy chevre ese post!!!

 

Publicar un comentario

Suscribirse a Comentarios de la entrada [Atom]

<< Página Principal